Como diente de león — P. Fernández Senac

Los dientes de león son trocitos de nubes que han echado raíces porque tienen miedo a volar.

Esas palabras que Diana dice a su pequeña reflejan la forma en la que ella se ha sentido durante el último año. La muerte de su marido de forma inesperada descose por completo su día a día, y durante un tiempo va dando puntadas a ciegas. El dolor, vestido con traje oscuro y sonrisa torcida, es su nuevo compañero de piso y la acompaña en el descubrimiento de una traición que no esperaba. El miedo, como un borrón de carboncillo, oscurece algunas de las decisiones que debe tomar.

¿Saben esos libros que, aburridos, compramos en Amazon porque casualmente están gratis? Pues ésa es la razón de la adquisición de este libro. De hecho, como siempre me paso al menos una vez por semana por Amazon para ver qué cosita puedo pillar, creo que se vienen bastantes reseñas de libros de autores autopublicados.


«... es importante enfrentarse a lo que nos asusta...»

PROS:

1. La carga emocional:

De acuerdo, normalmente es tedioso leer sobre las dudas y los dolores internos de los personajes durante más de dos páginas. Desde mi punto de vista, pocos autores logran entretener con eficiencia describiendo lo que se siente al perder a un ser amado. En este aspecto, debo aplaudir a Pilar Fernández porque, a pesar de tirarse casi la mitad del libro girando sobre básicamente lo mismo, añade las suficientes variables como para seguir leyendo sobre su dolor y todas las fluctuaciones de sus sentimientos a medida que va pasando el tiempo y se suceden las conversaciones amistosas y no tan amistosas.

2. Protagonista:

Estamos viendo todo lo que ocurre alrededor (y dentro) de Diana, nuestra protagonista que se queda viuda con una niña de tres años. Está rodeada de personajes secundarios que lograrán sacarle unas sonrisas de vez en cuando, que serán su apoyo en las duras y en las maduras, con los que discutirá... Como personaje me ha gustado porque tiene las cosas claras y no es de las que se revuelcan en su miseria durante largas páginas. Si le ocurre algo, lo afronta con más o menos valor, pero siempre lo afronta, como buenamente puede; lo cual es de agradecer con la de protas insoportables que hay pululando por ahí.

«Conforme la vida te regala segundos, el cuerpo, el alma y todo eso de lo que estamos hechos se adapta a los cambios

3. Secundarios:

Como acabo de decir, tenemos una variopinta colección de personajes rodeando la historia de nuestra Diana. Está su hijita, la familia de su marido, vecinos, amistades y familiares. Cada uno de estos personajes tienen un relativo desarrollo personal, es decir, no están solamente para solucionarle o crearle problemas (sumando a la trama) a la protagonista, sino que tienen sus pesares y alegrías, sus amores y desamores. Siendo una autora amateur, se agradece mucho el entramado completo que creó para cada uno de estos secundarios.

CONTRAS:

1. La niña:

Nerea, la hija de tres años de Santi y Diana, no se equivoca nunca en las palabras ni pronuncia mal ninguna. Lo entiendo como un descuido de la autora. Aparte de eso, hace unas preguntas que dudo una niñita haga. Los chiquis son muy inteligentes y no les damos el crédito que merecen, pero de ahí a que sean taaaan perceptivos hay mucho trecho. No me la creo.

2. Actitud frente al tema central:

Como diente de león habla sobre la pérdida. Sea cual sea. Tenemos a Diana, que ha perdido a su marido y, con él, a uno de sus pilares. Esta pérdida la obliga a enfrentarse a la vida desde otra perspectiva y, al ir descubriendo ciertos hechos del pasado, deberá salir de un pozo emocional. Escondiéndose a veces y fingiendo otras. Otros personajes pierden la estabilidad económica que poseían; otros, la estabilidad emocional; otros, los calzoncillos por una mujer que no les hace ni caso... En fin, que siempre estamos en la lucha de perder y ganar. Lo que le ocurre a cualquier persona que camina por la calle.


Sabemos que Diana se queda viuda. Sabemos cómo reacciona ella, pero no cómo reaccionan sus amigos y familiares; y es ése mi punto en contra de este libro. Me explico: la gran mayoría de las personas le dicen que debe seguir adelante y que tiene que buscarse un hombre que la haga volver a sentirse feliz o que le eche un polvo. No lo veo mal como consejo, pero todo a su tiempo.

Durante todo el libro solamente pasa un año y poco (por lo que pude deducir) y es muy poquito tiempo para ponerse a pensar en ello, sobre todo cuando se lo dicen ya desde el tercer o cuarto capítulo. NO me ha gustado nada que se plante la semilla esa de que "pon a un hombre en tu vida porque, si no, no vas a poder salir del pozo". ¡Qué cojones! Eso me enferma como mensaje. Diana es una mujer libre y puede hacer lo que quiera, de acuerdo. Lo que me chirría mucho es que a los poquitos meses de morir su marido, sus amigas ya estuvieran buscándole citas ¿para que volviera a sonreír? Pues les digo dos cosas: NI una mujer de su fuerza, inteligencia y decisión necesita un revolcón para sentirse bien, NI se puede apresurar a alguien en su tiempo de duelo.


Ése es mi único contra para este libro, y no me explayo más con el tema porque me enciendo y me voy por las ramas 😂😂


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